Teoricista Dawncloack
Estoy muy ocupado haciendo lo que hago, así que, si me vas a decir que he tardado mucho en contestar, métete la lengua en el ojete.
Total que ya os dije que iba a pasar por Mali.
Pos eso hice. Mucho sol, mucho calor, mucho polvo, mucho trabajo, y mucha diversión.
Para empezar, comentaros que fue muy interesante. Fui allí porque el ejército maliense ha comprado una partida de lanzagranadas rusos, y necesitaban a alguien que hablara francés para entrenar a los instructores del ejército. Como yo hablo francés, más o menos, me lo pidieron a mi.
Bueno, fue una mierda, pero me pagaron bien. (Como molan los blogs, puede escribir lo que te rote).
Aunque no fue todo lo malo: Chavez no vino. Pero mandó un video. Y nada.
Por otro lado fue duro: mucho sol, largas horas de trabajo (de 8 a 13h y de 16 a 20h... solo que más de una noche hubo horas extra). Y sobretodo, el puto polvo. Yo me lavaba mis metálicas greñas por la mañana, y joder, a los 3 minutos de salir de casa ya estaban secas.... y también llenas de polvo. La hostia.
Bueno, tendría que decir que los mosquitos fueron también un problema, pero no es verdad. Nunca me pican.
Partes buenas: alojamiento. Vivíamos (los currantes) en unos bungalows construidos para el personal del banco mundial, (que estuvieron por ahí construyendo una presa). Hasta agua caliente teníamos... comparativamente, estabamos muy bien.
Y la comida... dios que de puta madre comía. Hacían un arroz con carne y una salsa de cacahuete que te morías... el primer y segundo día. Después se te inflaban las narices y te ibas a la cola vegetariana con tal de comer algo diferente.
Otra cosa dura: es un país muy pobre, y no es nada facil estar allí y sentir las miradas. SObretodo porque, nos guste o no, occidente tiene bastante responsabilidad en la pobreza africana.
El único punto extraño es que mi compañero de habitación era un Beniense que tenía una curiosa costumbre. Yo ponía el despertador a las 7h... tiempo de sobra para ir al tajo. Pues este tio, a las 6h30 todos los días me venía a despertar diciendome que ya era de día. Cada 5 minutos hasta que me levantaba.
¡Qué adorable preocupación y espíritu cristiano! Y que cabrón que no me dejaba dormir.
Pos nada, os pongo unas fotos. Del rollo guay.
Primera foto, Bamako, capital de Mali. Vista hacia el norte.
Segunda foto: Gallina de Mali.
Su evolución ha seguido un curso curioso. Dispone de dos patas muy tochas para poder salir zumbando en cualquier situación y que no se la coman.
Ultima foto: aqui vivian aquellos para los que yo trabajaba, mis superiores en cierta forma (occidentales por cierto). Ja, vivía mejor yo que ellos.
Venga de metal.
jueves, 22 de marzo de 2007
Suscribirse a:
Entradas (Atom)